La Samaritaine Paris Pont-Neuf abrió finalmente sus puertas al público. Pero ¿Cuál es la historia?, ¿Qué se puede encontrar en La Samaritaine en Paris?, ¿Qué tal es la experiencia? En DescubreParis.com te contamos todo.
HISTORIA
¿Por qué se llama La Samaritaine?
La historia de este lugar se remonta a Henri IV. EL monarca manda a construir una bomba de agua que toma el agua del Río Sena y servía el barrio de Louvre y fue adornada con una estatua representando a La Samaritana y el pozo de Jacob, citada en la Biblia. Esta bomba y la estatua fueron demolidos en 1813. El terreno fue comprado por Ernest Cognacq, quien pone un almacén llamado La Samaritaine, y que fue un éxito rotundo desde su primer año. El comerciante poco a poco empezó a comprar terrenos aledaños y se casó con Marie-Louise Jäy, ex vendedora del Bon Marché, la boutique por departamentos pionera de París. El éxito del lugar continuó creciendo, y se volvió muy representativo de los parisinos. Eran muy famosos sus desfiles y fiestas.
¿Por qué estuvo cerrada La Samaritaine?
Desafortunadamente el negocio empezó a tener pérdidas económicas y fue cerrada al público definitivamente por la Prefectura de Policía en 2005 por motivos de salubridad y de seguridad.
La Samaritaine de hoy
Lo que no mucha gente sabe, es que La Samaritaine en Paris que vemos hoy no es solamente la boutique como tal, hay un proyecto mixto que tiene un hotel de lujo (Cheval Blanc), oficinas, guarderías para niños y viviendas, en un marco de respeto por el patrimonio arquitectónico que representa este edificio. La insignia fue comprada por el grupo LVMH en su totalidad en 2010. Después de 15 años de trabajos, la pandemia retardó al 2021 la reapertura de este lugar, que ya atrae locales y turistas, enamorándonos aun mas de París.
¿QUÉ HAY EN LA SAMARITAINE?
La Samaritaine está organizada por secciones y por pisos. Aunque es principalmente una boutique de lujo, es verdad que pensaron en tener una oferta para todos. Aquí les contamos lo que hay en La Samaritaine en Paris.
Accesible a todos los bolsillos:
La Boutique de Loulou, una boutique tipo miscelánea con artículos de diferentes precios. Está ubicada a la entrada del almacén y uno fácilmente se puede antojar de cualquier cosa de recuerdo.
El área de belleza y cuidado de la piel más grande de Europa:
Con marcas que van desde las más costosas hasta las mas accesibles, pero todas de muy buena calidad, el espacio de belleza y cuidado incluye por supuesto maquillaje, perfumes, pero también cuidado de la piel, hay incluso un bar de maquillaje, una peluquería, un spa. Difícil salir con las manos vacías.
La moda:
La moda está organizada por pisos entre hombres, mujeres, streetwear y outdoor, zapatos, bolsos, relojería y joyería. Las marcas de lujo infaltables Louis Vuitton, Dior, Gucci, Bottega Veneta, Prada entre muchas otras. De qué deleitarse, inspirarse y antojarse.
Para comer:
Una de oferta de más de 10 lugares entre restaurantes, cafés, pastelerías y panaderías completan la experiencia en La Samaritaine. Se destaca en el ultimo piso, donde se encuentra la hermosa vidriera del Art Nouveau y frente al fresco de los pavos reales, el restaurante “Voyage” (viaje en francés), en el que se mezclan gastronomía, coctelería y música. Otros de los lugares para darle gusto a las papilas gustativas son: un salón de té con postres de Dalloyau, un nuevo concepto de streetfood basada en Caviar, una panadería bar, un bar de jugos, un café parisino y mucho más. Nosotros probamos uno de los postres de Dalloyau a base de frambuesas y quedamos con ganas de volver.
Dato meticuloso: los meseros y anfitriones están vestidos con Lacoste y su atuendo irá cambiando con las estaciones.
Servicios:
Hay varios servicios: de estilismo, de empaque de regalos (wow), shopping con las manos libres (alguien te carga todo y haces un solo pago al final), y muy interesante el taller o atelier de personalización.
NUESTRA EXPERIENCIA
Primero que todo tuvimos la suerte de no tener qué hacer fila para entrar. Por supuesto, la situación sanitaria relacionada al COVID-19, hace que se deba controlar el flujo de personas, pero al final esto no es malo, porque al interior no nos sentimos ni ahogados ni agobiados con tanta gente, se puede disfrutar del almacén. Llegamos a eso de las 14:00 y cuando salimos (tipo 17:00) había una fila larguísima para entrar. Sugerencia: vayan temprano o horas en las que nadie quiere ir (a la hora de comer por ejemplo).
Increíble pero cierto
Lo que si nos llamó la atención y nos impactó gratamente fue la AMABILIDAD y es espíritu de servicio de TODO el equipo. Todos, todos, todos, todos felices y contentos de verte, e incluso, muchos venían a ti y ¡te hablaban! Esto es de “no te lo puedo creer” en París, en donde normalmente el servicio es más de “dejar al cliente libre” o incluso “que se desenvuelva como pueda”, o “que pida ayuda si lo necesita”. En La Samaritaine no fue así. No sabemos si es por que acaban de abrir, pero nos quedó la sensación de que todo el mundo tiene una actitud muy “cool” y relajada. La verdad fue muy agradable, porque esto te hace sentirte libre de preguntar, de entrar, de mirar, de tocar. La sensación de cercanía es algo diferente y novedoso para una experiencia de compra en Paris. Nos gustó. ¡La Samaritaine en Paris es una experiencia a repetir sin moderación!
INFORMACIÓN PRÁCTICA LA SAMARITAINE
La Samaritaine Paris Pont-Neuf
9, Rue de la Monnaie 75001
Horarios:
Abierto 364 días al año de lunes a domingo de 10h00 a 20h00. Cerrado el 1 de mayo.
Acceso:
Metro 1, 4, 7, 10 y 11: Chatelet, Louvre-Rivoli, Mabillon, Pont-Neuf
RER A, B y D: Châtelet-Les-Halles
Bus: 21, 27, 38, 58, 67, 69, 70, 72, 74, 85.
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A bientôt!
Angela
